Un análisis publicado en el European Journal of Preventive Cardiology dice que beber té puede estar asociado con vivir más saludable y más largamente.
Lo odias o lo amas, no puedes ignorarlo. Los indios confían tanto en el té que 2-3 tazas son una parte obligatoria de cada día. La bebida tan querida nos fue presentada por nuestros maestros coloniales, pero nunca la hemos soltado y ahora la hemos adoptado en el paladar indio como nuestra.
¡El té es una decocción que sin esfuerzo es a partes iguales relajante, calmante y satisfactorio!
Sus beneficios y limitaciones para la salud han sido un tema de debate durante varios años, y las afirmaciones suponen cualquiera de las partes. Sin embargo, un análisis reciente publicado en el European Journal of Preventive Cardiology dice que beber té puede estar asociado con una vida más saludable y más larga.
¿Qué muestra el estudio?
El estudio incluyó a más de un lakh de participantes del proyecto China-PAR sin antecedentes de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular o cáncer. Los participantes se clasificaron en dos categorías: bebedores de té habituales y no habituales.
Los análisis llegaron a la conclusión de que los participantes del estudio de 50 años que eran bebedores habituales de té desarrollarían enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular 1,41 años más tarde que sus homólogos que no bebían té. Además, la incidencia de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares fue un 20% menor en las personas que consumían té habitualmente. También hubo un 15% menos de riesgo de muerte por cualquier causa entre los bebedores habituales de té.
El primer autor del estudio, Xinyang Wang de la Academia China de Ciencias Médicas, Beijing, también confirmó:
“El consumo habitual de té se asocia con menores riesgos de enfermedad cardiovascular y muerte por cualquier causa. Los efectos favorables en la salud son los más sólidos para el verde té y para bebedores habituales de té a largo plazo”.
“Los efectos protectores del té fueron más pronunciados entre el grupo de consumo habitual de té. Los estudios de mecanismos han sugerido que los principales compuestos bioactivos del té, a saber, los polifenoles , no se almacenan en el cuerpo a largo plazo. Por lo tanto, la ingesta frecuente de té durante un período prolongado período puede ser necesario para el efecto protector cardiovascular “, agregó el autor principal del estudio, Dongfeng Gu.
Un análisis detallado reveló que los bebedores de té verde pueden vivir una vida más larga que el té negro u otras variedades de té. Esto se debe a que el té verde es una fuente rica en polifenoles, mientras que en el té negro estos polifenoles se oxidan debido al proceso de fermentación y por lo tanto pueden perder sus efectos antioxidantes. Además, el té negro se sirve generalmente con leche, lo que puede contrarrestar los efectos favorables del té sobre la función cardiovascular.
¿List@ para vivir más?