Porque tienes que dejar de fumar
Porque tienes que dejar de fumar

Porque tienes que dejar de fumar

Dejar de fumar es un paso muy complicado, pero enseguida empezaremos a notar cómo mejora nuestra cuerpo.

Muchos fumadores intentan dejar de fumar por sí solos. Unos lo consiguen mientras que otros se quedan por el camino.

A pesar de que existe la creencia de que dejar de fumar es difícil se puede afirmar que dejar de fumar es posible y, para no recurrir solamente a la fuerza de voluntad, existen varios métodos y programas para ayudar a dejar de fumar, además de montones de razones para llevar a cabo la tarea.

¿Fumar es malo?

Aquí os presentamos 12 cosas que notaréis tras dejar de fumar; cosas que empiezan a notarse a partir de los 20 minutos desde el último cigarrillo y que sirven como motivación para animarse a dejar el hábito de fumar.

  • La presión arterial baja a valores normales y se incrementa el flujo sanguíneo.
  • La temperatura de las manos y de los pies aumenta. Al igual que lo anterior, comienza a notarse tan sólo transcurridos 20 minutos después del último cigarrillo.
  • Dos días después mejora el gusto y el olfato: estos sentidos empiezan a “funcionar” de nuevo.
  • Los bronquios se relajan, lo que lleva a respirar mejor. 3 días es lo que se necesita para que comience el incremento de la capacidad pulmonar.
  • Después de 15 días, mejora la circulación; resulta más fácil caminar.
  • Adiós a las carrasperas matutinas; disminuye la tos y la congestión nasal. Y el gasto en caramelos.
  • Mejoría en la vida sexual: la fatiga y los ahogos ya no son un problema, debido a que los pulmones van teniendo más capacidad.
  • La piel ya no estará seca ni arrugada. Hay más oxígeno en el organismo para mantener las células de la piel vivas.
  • El olor desaparecerá poco a poco de la casa, de la ropa, del coche, ¡incluso de las mascotas!
  • Mejoría emocional: te sientes satisfecho por haber abandonado el tabaco y piensas que vale la pena pasar por ello.
  • Después de un mes (y en los siguientes) aumenta la sensación de bienestar general. El organismo recupera vitalidad.
  • Tu dinero durará ¡un poquito más!
  • ¡Ahora es el momento!

tips para dejar de fumar

Podemos comprobar que dejar de fumar tiene claros beneficios para la salud, tanto físicos como emocionales.

Los ex-fumadores tienen un riesgo de mortalidad más bajo que aquellos que continúan fumando. Cuanto más tiempo pasa tras dejar de fumar más se reduce el riesgo de desarrollar cánceres y enfermedades producidas por el tabaco.

Si piensas en dejar de fumar recuerda estos puntos, o piensa en otras motivaciones personales, para llevarlo a cabo. Fumar no es nada bueno para tu salud y por eso debes ser consciente que dejarlo, es la mejor opción para ti. ¡Lo agradecerás!

El tabaco puede provocar dolor de cabeza

La comunidad médica coincide, hoy en día, en que no se le puede recomendar a una mujer que fume con el objetivo de mejorar los síntomas que rodean un episodio de migraña.

Actualmente, y gracias a estos datos, sabemos que para aquellas mujeres que sufren de esta patología, fumar más de 5 cigarrillos al día puede provocar una crisis, por lo que las vías de paliación del dolor pasan por otro tipo de técnicas que no están relacionadas, precisamente, con el tabaco.

Dejando de lado una enfermedad tan específica como la migraña y centrándonos en las jaquecas comunes. Aunque los beneficios de Tylenol para ayudar a disminuir el dolor de cabeza pueden ser de gran ayuda para ti, es importante que consideres en dejar de fumar.

Los médicos también coinciden en señalar que tanto la acción de fumar como la inhalación del humo de los cigarrillos pueden contribuir a generar dolores de cabeza tanto en las mujeres que consumen tabaco como en aquellas que no lo hacen.

Por un lado, nos encontramos con el factor nicotina. Esta es una sustancia que estimula tanto la actividad cerebral como los nervios situados en la parte posterior de las amígdalas, por lo que se tiende a señalar que dicha estimulación puede llegar a alterar nuestro organismo y provocar anomalías debido a la propia adicción que provoca.